El nuevo presidente electo de Estados Unidos, Donald Trump, amenazó este lunes con “poner fin” a la relación diplomática con Cuba negociada por el presidente Barack Obama.
En la red social Twitter, el magnate escribió este mensaje: “Si Cuba no está dispuesto a hacer un mejor acuerdo para el pueblo cubano, el pueblo cubano-americano y EE.UU. en su conjunto, voy a terminar el trato”.
El tuit sobre Cuba se produce tan sólo un día después de que asesores de alto nivel de Trump se comprometieron a lograr un “mejor trato” con la isla caribeña tras la muerte del ex líder Fidel Castro -la semana pasada a la edad de 90 años-.
El equipo del millonario republicano ha dicho que la Administración saliente hizo demasiadas concesiones a Cuba, como la flexibilización del embargo económico de larga data, sin obtener suficiente contrapartida en temas como los derechos humanos y la democracia.
Entrevistado por Fox News el domingo, Reince Priebus, quien será el jefe de Gabinete del nuevo gobierno, advirtió que “tenemos que lograr un mejor trato” o Trump “dará marcha atrás” al acercamiento con la isla.
Antes de las elecciones, Donald Trump dijo en su último discurso en Miami: “Cancelaremos el acuerdo unilateral de Obama con Cuba hecho a través de una orden ejecutiva. Haremos el acuerdo que se merece la gente que vive en Cuba y aquí, que proteja las libertades políticas y religiosas”.
En marzo, Obama se convirtió en el primer presidente estadounidense en visitar Cuba en 88 años. Los dos países anunciaron que volverían a abrir las relaciones diplomáticas en diciembre de 2014, poniendo fin a un distanciamiento que comenzó cuando la revolución cubana derrocó a un gobierno pro-americano en 1959.
Obama fue recibido en un principio por el canciller Bruno Rodríguez – no el presidente, Raúl Castro.
Trump twitteó en ese momento: “Wow, el presidente Obama acaba de aterrizar en Cuba, una gran cosa, y Raúl Castro no estaba allí para recibirlo, mientras que sí recibió al Papa y a otros”.
A pesar del deshielo de las relaciones, algunas tensiones se mantuvieron.
Durante la visita de Obama, Castro parecía molesto cuando se le preguntó sobre los presos políticos durante una conferencia de prensa.
