Polémica Entre los Aspirantes al Balón de Oro

Hidalgo Sport, Agencias.- ¿En dónde se ha visto que una vez definido el nombre del ganador de un título de fama mundial, se reabra la votación para borrar el resultado de la elección sólo para contentar un capricho? Sucedió en esta recta final de 2013. Sospechosamente, después de que finalizaran las Eliminatorias de repechaje en Europa para clasificar al Mundial de Brasil 2014. Es por eso que Franck Bilal Ribéry (Boulogne Sur Mer, Francia, 7 de abril de 1983), Lionel Andrés Messi Cuccitini (Rosario, Argentina, 24 de junio de 1987) y Cristiano Ronaldo dos Santos Aveiro (Funchal, Portugal, 5 de febrero de 1985), aspiran a ganar el Balón de Oro más embarrado de la historia.
Ribéry (1,70m, 72kgs), se consagró campeón en 5 oportunidades durante 2012-13 con el Bayern de Múnich. El francés del rostro que jamás se olvida alzó por sobre sus hombros la Bundesliga (liga alemana), la DFB Pokal (Copa de Alemania), la UEFA Champions League (Copa de Europa), la Supercopa de Europa y el FIFA Clubs World Cup (Mundial de Clubes). En todos y cada uno de los títulos tuvo una presencia estelar. Fue el jugador distinto del cuadro bávaro, el mejor equipo del planeta en la actualidad.
Ribéry sería un gran Balón de Oro para una temporada, en cualquier época. Le sobra técnica. También carácter. Tiene una cuota importante de gol, aunque marcar no sea su faceta más determinante. Asiste. Desborda. Decide.
Hay indicios de que el crack francés, del Bayern desde el 1 de julio de 2007, había sido electo Balón de Oro por la suma de los votos que arribaron a FIFA el día 15 de noviembre -fecha límite para votar-, y con anterioridad a esa fecha. Sin embargo, el día 19 de noviembre Joseph Blatter, presidente de la FIFA, decidió reabrir la votación por primera vez en la historia, con la excusa oficial de que algunos votantes aún no se habían expedido.
En realidad, a Blatter le expuso su falta de timing, ya que decidió la reapertura de la votación instantes después de que Portugal consiguiera clasificarse para disputar la copa del mundo de Brasil 2014 en la repesca contra Suecia gracias a tres goles de Cristiano Ronaldo. Nadie olvida que el pasado 25 de octubre, en un coloquio que protagonizó en la Oxford Union Society, el máximo mandatario de la FIFA comparó a Cristiano Ronaldo con Lionel Messi y eligió al jugador argentino como su “preferido”. Oportuno como en el área, Ronaldo dijo entonces entender por qué no ha podido ganar nunca el Balón de Oro en los últimos 4 años, en los que Messi ha logrado el póquer. Seguidilla que nadie discute.
Ribéry, quien en 2012-13 apenas estuvo 8 días lesionado (entre el 10 y el 18 de marzo de 2013) por un estiramiento del ligamento de su rodilla derecha, tiene derecho a sentirse perjudicado por la decisión de Blatter. Como también Lionel Messi, a quien algunos sondeos a boca de urna le daban como ganador. Messi (1,69m, 67kgs), es acaso el mejor jugador de toda la historia. A sus 26 años lo ha ganado todo. Apenas le falta conseguir el Mundial con la selección argentina, si es que se debe considerar la copa del mundo como una asignatura pendiente, cuando varios de los más grandes de todos los tiempos como Johan Cruyff y Alfredo Di Stéfano no la ganaron.
Messi ganó con el FC Barcelona la Liga 2012-13, el campeonato que marca la hegemonía de un club y la supremacía de un grupo de jugadores, en un país. El mayor mérito de Messi es haber conseguido ser indescifrable en la era de la información, aunque millones de personas estudian a diario sus movimientos sobre el terreno de juego.
En 2012-13, Messi sólo estuvo 21 días lesionado. Entre el 2 y el 7 de abril por un problema en el tendón posterior de la rodilla izquierda, y entre el 12 y el 28 de mayo por el mismo inconveniente. Lo que le impidió rendir al ciento por ciento en el último mes de la temporada.
No obstante, Messi fue absolutamente clave en la consecución del título por parte del Barça al marcar el 40% de los goles del equipo en la temporada del récord goleador del club en toda la historia (115 tantos), el capitán de la selección argentina es esencial. Juega. Hace jugar. Desaparece, para volver a aparecer en el momento justo y en el lugar indicado. Y rompe los partidos con apenas un pase de magia.
Además guió a su selección al liderato de la eliminatoria en el camino rumbo al Mundial y entró por la puerta a la Copa del Mundo de Brasil. No necesitó de una ventana para poder hacerlo como ocurrió con Ribéry (Francia superó a Ucrania en la repesca europea) y con Cristiano Ronaldo.
Cristiano Ronaldo (1,86m, 84kgs), es un extraordinario jugador. Con virtudes inalcanzables para cualquier otro colega. El impedimento para prevalecer se debe a que comparte su época con la de Lionel Messi. Le ocurre lo mismo que a Lionel Ritchie con Michael Jackson o lo que debió vivir Cindy Lauper con Madonna. O lo que padece Kobe Bryant con Michael Jordan, y hasta cualquier tenista que comparta court con Roger Federer.
El delantero de Real Madrid es un depredador, pero sólo consigue lucirse en rigurosa soledad cuando Lionel Messi está ausente por lesión. Su mayor capital reside en el gol, y aún así ha sido superado por Lionel Messi en las últimas campañas. La única campaña que gana sin discusión es la que se motoriza a nivel mediático desde Madrid en forma oficial y oficiosa para que reciba el Balón de Oro el lunes 13 de enero en Zurich. Orquestada de manera insistente y pertinaz, como la candidatura de la misma ciudad cada vez que intenta ser sede de los Juegos Olímpicos.
El rasgo distintivo del portugués es su formidable capacidad física. Digno de admiración. Casi nunca se lesiona y cuando le ocurre algún percance, siempre es de alcance menor. Esto habla no sólo de su contextura como portento, sino de su altísimo grado de profesionalismo.
Especial atención a los números de cada aspirante al Balón de Oro, última escala antes de concluir en quién debe ser o quién es el gran merecedor del galardón.
En 2012-13, Franck Ribéry disputó 2115 minutos en la Bundesliga, en los que marcó 10 goles. En la DFB Pokal sumó 183 minutos. Y en la UEFA Champions League jugó 853 minutos en los que convirtió 1 gol.
En 2012-13, Lionel Messi disputó 2644 minutos en la liga española, en los que marcó 46 goles. En la Copa del Rey sumó 442 minutos en los que consiguió otros 4 tantos. Y en la UEFA Champions League jugó 826 minutos, en los que convirtió 8 goles más.
En 2012-13, Cristiano Ronaldo disputó 2718 minutos en la liga española, en los que marcó 34 goles. En la Copa del Rey sumó 655 minutos en los que consiguió otros 7 tantos. Y en la UEFA Champions League jugó jugó 1080 minutos, en los que convirtió 12 goles más.
Veredicto. Si se ha de premiar al jugador que más títulos ha ganado en la temporada, observando un alto rendimiento individual, el Balón de Oro debe ser para Franck Bilal Ribéry.
Si la intención es premiar al jugador que mezcla grado de influencia en el juego de su equipo con implicación en el logro de un título, más capacidad para marcar goles, el Balón de Oro debe ser para Lionel Andrés Messi Cuccitini.
Si el objetivo es restablecer con una condecoración en forma de pelota dorada como coartada a la relación con el goleador sensacional con el que algunas multitudes se sienten identificadas, el Balón de Oro se lo darán a Cristiano Ronaldo.
Aclaración: Para la confección de este artículo fueron utilizadas estadísticas de 2012-13 porque los méritos del premio responden mayoritariamente a ese período. La temporada termina en junio y el límite histórico para votar es el 15 de noviembre. La elección obedece al año, pero tiene un defecto de organización, ya que el año finaliza el 31 de diciembre y sin embargo se elige casi dos meses antes.